Alejandro Melamed, reconocido consultor y autor de libros sobre innovación en RRHH, detalla en esta nota ocho tendencias en gestión del talento claves para el nuevo año.

El factor humano se identifica en forma creciente como el gran diferenciador de las organizaciones y sociedades que se destacan y logran resultados sostenidamente superadores. Las principales tendencias en la gestión del talento -más allá de la empresa, su tamaño, origen o industria- para el 2019 son:

– Búsqueda de propósito personal y organizacional.

El cambio ya no es simplemente adaptarse, es transformación con sentido. Los mejores talentos eligen cada vez más trabajar en aquellas empresas que tengan un propósito trascendente, alineado con el propio. Cuidar el planeta, la salud, la educación, la niñez, la vejez o la paz son algunas de las causas a abrazar -entre muchas otras- que impulsarán un compromiso auténtico y duradero

La nueva sustentabilidad

Ética y transparencia total. Si hubo un aspecto que distinguió al 2018 fue el de la ética y los valores. De ser un «innombrable» a ser el tema a considerar, generando y consensuando los sistemas, procesos y herramientas para asegurar su cumplimiento en cada intervención, de cada integrante. Es la nueva visión de operar saludable, transparente y sustentablemente.

– Prepararse para el trabajo del futuro

Las consecuencias de la revolución 4.0 en el ámbito laboral generan inquietud generalizada. Cómo desarrollar las competencias, habilidades y capacidades para poder incrementar la empleabilidad -habilidad de tener el empleo que nos apasiona, en el corto y en largo plazo- es una prioridad y responsabilidad ineludible en el contexto de volatilidad creciente.

– Agilidad en el área de recursos humanos

El concepto de agilidad se afianzó como una forma de gestionar, pensar y liderar. Sin embargo, son pocos los departamentos de RR.HH. que han incorporado metodologías ágiles a su propio quehacer. Es uno de los grandes desafíos que requerirán un cambio de mentalidad y estilo; brindará velocidad de respuesta, simplicidad, precisión en las soluciones y optimización de costos.

– Big data, robótica e inteligencia artificial aplicada a RR.HH.

Para capitalizar al máximo las tecnologías exponenciales y transformar las métricas en información para tomar las mejores decisiones respecto de las personas, minimizando tiempos transaccionales. RR.HH. pasa a ser un jugador clave en la organización, focalizándose en los aspectos que realmente agregan valor al negocio y utilizando inteligentemente las herramientas disponibles.

– Compromiso a partir del viaje y experiencia del colaborador.

La visión tradicional de medir solamente el clima una vez al año evoluciona a generar nuevas formas de compromiso a partir de experiencias significativas en cada una de las estaciones del viaje del colaborador. La gamification (el juego aplicado) y el apalancamiento en las tecnologías digitales y móviles se utilizan para ofrecer vivencias memorables. La flexibilidad pasa a ser considerada uno de los componentes claves de la propuesta de valor.

– Diversidad en el más amplio sentido.

La cultura diversa e inclusiva es el principal generador de ambientes que impulsan la innovación disruptiva. Seleccionar, desarrollar y evaluar talento en función de sus resultados, valores y potencialidades y no de sus particularidades -género y orientación sexual, política y religiosa, origen, nivel socioeconómico, generación, discapacidades, etc.- es un rasgo cultural central. De igual manera, los mecanismos preventivos para eliminar de raíz la discriminación en cualquiera de sus formas, el acoso y la violencia de género.

– Nuevas formas de desarrollo que desafían las tradicionales.

Los colaboradores están cada vez más empoderados para adueñarse de sus propias trayectorias. Los knowmads (nómades del conocimiento) son referentes que circulan expandiendo ideas e inspiración en cada espacio posible. El aprendizaje social, a partir de comunidades de conocimiento -virtuales y presenciales-, con asignación a proyectos estratégicos, donde la colaboración se experimenta en el hacer y el error -si se aprende de él- es más que bienvenido.

Recursos humanos cada vez más es la conciencia humana y ética de las organizaciones. En tiempos de tanta turbulencia, la innovación en la gestión del talento es la manera de potenciar lo mejor de las personas, apalancándose en las oportunidades que nos brinda la tecnología e impulsando un entorno de trabajo cada vez más humano, saludable y sustentable.

Fuente: lanacion.com

Photo by unsplash

 

 

Facebooktwitterlinkedinmail