Los avances tecnológicos, las demandas de las nuevas generaciones y los cambios en el mercado de trabajo obligan a las empresas a pelear una guerra en la búsqueda de un bien escaso: el talento

Más flexibilidad y colaboración, organizaciones centradas en su gente, que impulsen el engagement y fomenten el desarrollo de líderes comprometidos con la transformación continua. Menos relevancia del espacio, trabajo en equipo y el surgimiento del smartworking.

Así se perfila el nuevo mundo laboral que ya empezó a irrumpir en las compañías de todo el mundo, que deben responder a las necesidades de los millennials, mientras se preparan para recibir a los primeros integrantes de la generación Z.

«Cambiaron los paradigmas. Cambió y sigue cambiando a un ritmo vertiginoso el contexto. ¿Cómo no va a cambiar el mundo del trabajo? En los últimos años, pudimos observar que el lugar que el trabajo ocupa en la mente para las nuevas generaciones ya no es el mismo de antes. Por ello, en lo referente a la atracción y permanencia del talento en las organizaciones, estos son solo algunos de los escenarios que las empresas surfean actualmente«, explica Marcela Petrillo, country manager de Von der Heide Argentina.

Asimismo, los colaboradores se preocupan cada vez más por el balance entre su vida laboral y la familiar, sin que ello signifique un menor compromiso con el trabajo, sino todo lo contrario. Esta preocupación se ve reflejada en lo que los empleados piden de sus empleadores, por lo que las compañías deberán aprender a escuchar sus demandas.

«Antiguamente, se veía al empleado como un trabajador de fábrica y sus manos como un capital. En la segunda ola, se lo concebía como una persona que piensa, que tiene empowerment; y se podría decir que estamos entrando en la era en donde el colaborador tiene un compromiso mayor con la compañía y, por ende, requiere ese mismo compromiso de la empresa para con él y su familia», detalla Guillermo García Avogadro, responsable de Recursos Humanos de GSK Argentina.

Por ese motivo, el laboratorio británico entiende que debe demostrar que tiene con sus empleados el mismo compromiso que ellos demuestran con la organización en la que trabajan. En ese sentido, la compañía ofrece beneficios como el pago de jardín de infantes hasta los cinco años para los hijos de empleados de ambos sexos, charlas de orientación vocacional para los hijos de trabajadores, así como la posibilidad de hacer su primera práctica laboral en el laboratorio.

«Esta práctica tiene como objetivo brindar a nuestros hijos una primera oportunidad laboral e incorporarlos al mundo del trabajo real, con sus derechos y obligaciones. Les permite también explorar sus áreas de interés e ir definiendo posibles cursos profesionales», agrega García Avogadro.

Reconversión del espacio

Otra de las tendencias que se puede apreciar surge del estudio global Work Trends 2015, realizado por Adecco. De acuerdo con el relevamiento, la flexibilidad en el espacio laboral de un individuo se convertirá en un aspecto clave para los nuevos estilos de trabajo en el futuro, algo con lo que concuerda Mercedes de la Fuente, People and Organization director para la Argentina, Uruguay y Paraguay de Mars AUP.

«Cada vez más el espacio deja de ser central en términos de aglutinar y convocar a las personas para desarrollar su trabajo diario. El paradigma de medir el rendimiento por las horas silla (tiempo que me paso en la oficina) pierde frente a medir el desempeño en base a resultados, por lo cual las instalaciones en las compañías más modernas son más flexibles, con espacios comunes y abiertos, que propician el intercambio, y escritorios que son utilizados por la primera persona que llega, nadie es dueño», explica De la Fuente.

De esta manera, crecen tanto las posibilidades como el deseo de los empleados por el trabajo remoto, algo que tecnológicamente es factible para la mayoría de los empleos actuales y que ya se convirtió en una demanda de las nuevas generaciones. «La necesidad de no malgastar el tiempo en traslados es otro de los factores que alienta el trabajo a distancia. Ya en muchas ciudades del mundo existen estaciones de teletrabajo que permiten realizar la tarea de forma remota sin que esto signifique hacerlo desde la casa«, agrega la ejecutiva de Mars.

Otra de las tendencias que describe el estudio de Adecco está relacionada con el concepto de smartworking, que consiste en utilizar las nuevas tecnologías de la información y la comunicación para gestionar de forma inteligente el trabajo, de tal forma que se pueda obtener una mayor rentabilidad. Movilidad, teletrabajo, comunicación permanente o flexibilidad horaria pasan a ser la base de la nueva modalidad laboral.

«A pesar de que la mayoría de los candidatos y casi la mitad de los reclutadores nunca han oído sobre este concepto, mostraron un gran interés en la integración de las soluciones que brinda este sistema en su práctica cotidiana. La aparición de estos nuevos conceptos creará un nuevo mundo de interacciones entre empleadores y empleados», explica Alexandra Manera, directora de Recursos Humanos de Adecco Argentina.

La actividad en redes sociales cobrará aún más importancia en los trabajos del futuro. Para los candidatos, la posibilidad de ser contactado por un reclutador aumenta con el número de redes sociales que se utilizan: por ser activo en una red, la probabilidad de ser contactado crece en un 16%, pero aumenta en un 46% cuando se forma parte de todas las principales plataformas sociales que existen en la actualidad, destaca la encuesta.

«LinkedIn continúa siendo la plataforma más elegida para fines profesionales, tanto por los reclutadores (61%) como por los solicitantes de empleo (34%). Facebook, en cambio, es la red más popular, a la que todos los sectores de la sociedad se dirigen para realizar sus distintas actividades sociales, incluyendo su marca personal», agrega Manera.

Mundo colaborativo

Otro factor que aparece como fundamental en las nuevas tendencias laborales tiene que ver con la manera de interactuar de las personas tanto interna como externamente a la compañía. «La colaboración es, por excelencia, la forma que se impondrá definitivamente.

La colaboración se podría definir como una superación del trabajo en equipo que hace pensar a la organización como un sistema nervioso donde las neuronas se conectan según la demanda y la necesidad. Se salta la limitación del área, de la función, para construir una red que está por encima. Incluso, ya podemos encontrar cantidad de ejemplos a nivel mundial donde la colaboración trasciende las fronteras de la empresa para plantear nuevas alianzas y co-creaciones entre grandes multinacionales y pequeñas startups«, indica De la Fuente.

En el mismo sentido, Petrillo destaca que se está asistiendo al nacimiento de un nuevo modelo de organización, colaborativa y en red, que cuestiona la estructura tradicional del organigrama y borra los límites jerárquicos, en pos de lograr una mayor alineación con los resultados de negocio.

En opinión de la ejecutiva de Von der Heide, en los próximos años se podrá ver cómo las organizaciones van adoptando nuevas estrategias de Recursos Humanos, ente las que destaca:

– La incursión de Big Data que facilita el acceso a un mayor y más rentable aprovechamiento de la información, para predecir y planificar las inversiones en el ámbito de Recursos Humanos.

El surgimiento de la ludificación, al servicio del aprendizaje continuo y la resolución de conflictos.

– Profesionales más interesados en trabajar por proyectos. Identificados con la función antes que con la empresa en sí misma.

Estas tendencias ya son realidad en algunas empresas, sobre todo en aquellas que tienen una base tecnológica, como Trivago, el sitio que permite comparar y reservar hoteles en todo el mundo.

«Los empleados exigen, ante todo, reconocimiento por su trabajo. Creo que eso no cambia con el tiempo. Buscan estar motivados, sentir que lo que hacen tiene un fin mayor y quieren ser recompensados, y esa recompensa no viene necesariamente con la remuneración. Puede venir con diferentes beneficios. Hoy los empleados exigen más libertad, mayor confianza y una integración entre el trabajo y el resto de la vida. La oficina tiene que ser un ámbito en donde uno se sienta cómodo y la pase bien», indica Francisco Lalanne, responsable de Comunicación de Trivago Argentina.

Para poder hacer frente a las demandas de sus colaboradores, Lalanne cuenta que la empresa ofrece, entre otros beneficios, que los propios empleados fijen su horario, la posibilidad de realizar distintas actividades deportivas, bebidas gratis en la oficina (incluso cerveza), espacios de recreación y un viaje anual que realizan todos los empleados. «La clave pasa por empatizar con cada empleado, entender sus prioridades. Los empleados exigen balancear su vida personal, beneficios a medida, homeoffice, flexibilidad horaria«, agrega Federico Villa, director de Bumeran.com.

Aunque ya algunas empresas locales empezaron a prestar atención, tomar nota e, incluso, aplicar algunas de estas tendencias, las que hacen punta son aquellas que tienen su casa matriz fuera del país. «Sin embargo, tenemos ejemplos autóctonos que se destacan principalmente en el sector de tecnología y e-commerce, como MercadoLibre o Globant. La flexibilidad horaria es una tendencia ya muy extendida, que en muchos casos se combina con semana comprimida o días libres en el año. Y cada vez es más habitual que las empresas en la Argentina cuenten con políticas de homeoffice», asegura De la Fuente.

Las empresas de hoy tienen la necesidad de adaptarse y reinventarse para lograr ganar la guerra por ese bien escaso que es el talento. «Si esto no sucede, cada vez más costará despertar en sus colaboradores el compromiso y el ownership que necesitan para seguir creciendo.

En definitiva, los empleados necesitan que la ecuación de la felicidad les dé positiva. Si la realidad de lo que las compañías dan y ofrecen supera las expectativas, tendremos colaboradores felices y comprometidos, y si las expectativas de los empleados resultan ser mayores a la realidad de lo que las compañías les ofrecen, costará mantener talentos», explica Adrián Giménez, VP de Marketing de Zonajobs.

Así también lo entiende Grupo Supervielle, que comprendió que debe cambiar hoy para poder hacer frente a los desafíos que se presentarán en el futuro. «Las compañías gestionan sus objetivos por proyectos. Esto requiere de la integración y colaboración de equipos multidisciplinarios, y personas que los lideren. Estos cambios sirven para organizar las nuevas formas de trabajo», manifiesta Santiago Batlle, gerente de Recursos Humanos de Grupo Supervielle. Como ejemplo de esta nueva estructura de organización, la entidad destaca que implementó programas para sus empleados como el coaching para senior management, mindfulness, homeoffice y red social corporativa.

«El desafío que hoy enfrentamos es doble: promover entornos laborales saludables y espacios de colaboración, ofreciendo posibilidades de desa-rrollo y feedback permanente. Este camino no puede recorrerse sin integrar la vida laboral a la personal. Debemos ser flexibles y escuchar. Los empleados, hoy más que nunca, deben participar en el diseño de la propuesta de valor hacia los clientes y comprender el sentido y la visión de la organización», concluye Batlle.

Fuente: elcronista.com

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